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miércoles, 4 de enero de 2012

Sin ánimo de lucro

Decidí llamarla así, me refiero a la entrada de hoy, porque para mí tiene un significado claro. Cualquier tipo de interés buscando un beneficio propio, llámese económico, sentimental, político, laboral, ... revuelca estas cuatro palabras y las somete a un centrifugado tal que ya no hay manera de volver al principio; a cambio pueden surgir otras construcciones menos altruistas, tipo desánimo i lucro, sinónimo de lucro, suma cruel, no ni monedas, culo de monos, ...pero como la original ninguna.

Del color que yo lo veo el marido de la infanta es un hombre influenciado por el colega que tiene nombre de cantante, no me imagino al primero llevando el cotarro de los negocios la verdad si no más bien dando fe con su firma que era lo que importaba realmente a la hora de cobrar. El hombre pondría la imagen, rubricaría los contratos, un forum por aquí, un simposium por allá y reiría nerviosillo cuando el lumbreras le enseñase los ceros a repartir en cada operación. Poco más.

¿Era consciente de la jugada?. Por muchos estudios financieros que uno tenga, másters del universo, postgrados centígrados, todo esto no sirve de gran cosa cuando uno tiene poca capacidad para asimilar contenidos y encima tus profes lo saben, tienen mala idea, conocen el medio y el sentido de la palabra oportunidad.