Publicar entradas con cierta regularidad no ocupa tiempo cronometrable pero de poder medirse sería considerable, intentar recoger momentos dignos de ser mencionados y que a la vez puedan resultar entretenidos también. Mantener una historia como esta fuera del círculo de amistades es una de las motivaciones que hace que siga escribiendo, sin artificios que puedan alterar esta humilde experiencia.
Hoy no tengo nada interesante que decir, no es que sea novedad pero lo siento así. Hay días que es mejor tirarse en el sofá a ver el fútbol, con unos sabrosos espaguettis con queso y carne picada preparados por mi parienta -dos años de experiencia cocinando en pizzería- y una cocacola bien fría. Esto es lo que estoy haciendo, ayer -hoy- eran las cuatro y media cuando me acosté, y ahora, después de haberme levantado a las siete y media para darlo todo en ocho horas de trabajo y dos de deporte, mi cuerpo dice basta. De todas formas hoy estoy de suerte, dispongo de cinco días libres a partir de ya; me marco un objetivo: hacer una cura de salud: comer, dormir y .... lavar la ropa.
