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viernes, 7 de mayo de 2010

Con madera de cumarú

¿Cuánto dinero cuesta hacer una casa?, ¿qué porcentaje va destinado al precio del material?, ¿es posible contruirla nosotros mismos?. Mi respuesta es sí. La ilusión es sorpredente.

Hace aproximadamente cuatro años, mi novia y yo compramos una casa. Viejita, de piedra y con todo el interior para restaurar. El tamaño estaba bien, la zona era próxima a las playas -por mi afición, era importante-, tenia un trocito de terreno y a ella le gustaba. El principal problema era que por dentro había que tirar todo: suelos, techos, paredes,... Estaba todo apolillado y la piedra sin tratar, cementada por encima con material del prehistórico y unas cuadras con caída que no superaban el metro setenta en la zona más alta, la electricidad no valía para nada y el tejado tendría que ser reforzado. Vamos, que estaba hecha un asco pero aún así la compramos. Llevábamos dos años mirando y no encontrábamos nada que nos gustase.

Como ya sabíamos de antemano, las reformas tendríamos que hacerlas nosotros pues no teníamos dinero para invertir en mano de obra. Disponíamos de un presupuesto de doce mil euros para gastos de material. Empezamos manos a la obra. Por cierto, ni mi novia ni yo sabíamos lo que era un nivel de aguas, un esparabel o un bruñidor; partíamos de un cero en albañilería pero no nos importaba. Que atrevida es la ignorancia.

Empezamos por destruir todo, la casa parecía una fabela por fuera y una cueva por dentro, que no había por dónde cogerla. A partir de ahí la planificación de la distribución de cuartos, los puntos de electricidad, cuadros de luz, colocación de suelos y levantamiento de techos, nuevas paredes. Restauración de piedra, enlucido de paredes, colocación de puertas, escaleras, alicatado de baños. Remates en madera o forja, pintado, enlucido. En total, dos años y medio de duro trabajo.

A día de hoy hace año y medio que vivimos aquí. Todo funciona: electricidad, fontanería, bisagras, calefacción, ...Lo que comentaba al comienzo, con ilusión todo se consigue. Siempre nos hemos asesorado: amigos profesionales, internet, la familia, internet, ... Todo vale para el que no sabe y si la gente ve que te lo curras, te ayuda de buena gana. Se les invita a comer y les colocas el buzo de trabajo sin que se den cuenta. Cuando se enteran ya es tarde. Esto ultimo es una broma, si no llega a ser por el apoyo de nuestros seres queridos nunca hubieramos podido conseguirlo. Gracias a todos, estamos muy orgullosos de nuestra casa. Y de vosotros.