Supongo que independientemente de la ideología de un diario de prensa escrita, dentro se alojan personas con ideales políticos contrarios a quien les ayuda con la economía del día a día, que dejan en la sesera su propia idiosincriasia a beneficio del sustento. Esta peña ahoga sus penas aportando su granito de arena en otras facetas de la vida, más maniobrables, más al alcance de su mano. Su antítesis, el outsider, busca lo contrario, navegar en aguas tormentosas porque motivan el espíritu, siempre al filo de la navaja.
Leyendo un periódico de buena tirada me encontré un artículo cuando menos curioso: los agentes de la autoridad decomisaron varias plantas de marihuana a los vecinos de un lugar; suponen ellos que a consecuencia de la crisis y el caluroso verano, este año la cosecha ha sido abundante. Hasta aquí todo normal. A medida que profundizaba en la noticia entendía que bajo el punto de vista de la policía esto forjaba un delito mayor: los cosecheros son presuntos camellos que utilizan sus ganancias para financiar sus enganches a otras drogas o paliar su economía tercermundista. Vale, es vuestra opinión y la de los que piensan como vosotros, hasta aquí ningún problema. Lo que no puedo entender es que al finalizar el artículo, en un banner publicitario justo al final del texto, se intenten vender armarios de interior para el cultivo de marihuana. Es incongruente, o una cosa o la otra. Sí, ya se que sois muy pillos y sabéis que mucha gente relacionada con el tema va a leer la noticia, que como estrategia de marketing es fabulosa y podríais sacar tajada pero o estamos a una cosa o a la otra, no son compatibles.
Mi opinión va por otro lado como ya expresé en Sustancia ilegal (5 Mayo) . El enlace con la noticia original aquí, juzgar vosotros mismos.
