Mañana se celebran las primarias que darán a conocer al candidato que representará al Partido Socialista, con la intención de desbancar a Esperanza Aguirre del trono de Presidenta de la Comunidad de Madrid. Lo tienen complicado.
El poder del partido pasa, según sus propios afiliados, por la gente de base, hormiguitas obreras que no sólo forman parte de la estructura sino que soportan los pilares del Grupo. Personas con años de experiencia a la sombra determinarán quién es el candidato ideal.
Me voy a permitir una licencia: está claro que el ganador será Tomás Gómez porque es un hombre forjado en Madrid -nació en Holanda-, y ser alcalde de Parla durante tantos años ejerce un liderazgo regional a vista de los miembros -pantalón de pana- del Partido, claramente superior al de Trinidad Jiménez. La mayoría estos votantes supongo pensará "Tomás Gómez es uno de los nuestros, encima es buen chaval, tiene buena presencia, fortaleza interior, ... por méritos propios debe dirigir el Partido". Los de la Ejecutiva Federal pensarán lo contrario pero son menos.
Del color que yo lo veo lo más justo sería que ganase Gómez aunque creo que lo más ambicioso es que lo hiciese Jiménez. Tiene más opciones de pelear por la Comunidad. La mayoría de los votantes a pie de pueblo, la mayoría real, la que determina el pulso, no creo que conozca el fondo del asunto y vota como votamos todos, por personalidad.
