No, esto no es un manual ni tampoco un diario publicitario, es simplemente un saco donde voy dejando lastres y reciclando el disco duro. No te lo tomes a la tremenda que tampoco es para tanto, que sea un secreto no quiere decir que tenga relevancia. Es una visión personal e intransferible, no se vende, es libre y por lo tanto no admite comentarios en línea. No censuro nada, todo lo contrario, pero creo que no hay nada que comentar, no ha lugar.
Cuando escribo sobre ello -ya he publicado con anterioridad sobre este tema- me da la impresión que me justifico. No quiero pedir perdón a nadie ni arrepentirme de alguna frase desafortunada, no quiero que ningún conocido me diga que ha visto mi blog, me sentiría avergonzado por tener que dar explicaciones y esto no está construído para mi círculo de amistades. Es un poco ese mundo interior que todos tenemos y queremos conservar incorrupto.
No quiero cambiar nada, Del color que yo lo veo es una versión humilde de una opinión sencilla, el día que deje de ser así, ris-ras, rompemos los papeles y a otra cosa mariposa.
